Este martes, una empleada policial de 22 años, denunció en la División de Violencia Familiar y de Género de General San Martín, un caso de abuso sexual por parte de un comisario de la División Criminalística local, lo que derivó en la inmediata intervención de la Fiscalía de Investigación Penal N° 1.
En paralelo al caso judicial, personal de la Dirección Investigaciones Complejas inició las actuaciones con carácter de sumario, suspendiendo de funciones preventivamente con retención de haberes al investigado y procedieron a la retención de su arma reglamentaria.
Tras la denuncia, se dictaron medidas preventivas, entre ellas, una restricción de acercamiento de 200 metros y la prohibición de todo tipo de contacto entre el denunciado y la empleada.
También se dio intervención a la Fiscalía de Derechos Humanos.
La investigación continúa bajo estricta reserva, y desde el ámbito judicial aseguraron que se garantizará el cumplimiento de las disposiciones mientras avanzan las diligencias correspondientes.
Desde la Jefatura de Policía se activaron los protocolos institucionales para asegurar la contención y el acompañamiento integral de la denunciante, a través de los organismos especializados en atención a las víctimas.
