Los alquileres comerciales continúan estables en Resistencia

Referentes del sector indican que la demanda es normal, a la espera de resoluciones que indiquen el camino que tomará la actividad económica.

El nuevo escenario de la economía en el país abrió numerosos interrogantes sobre la continuidad de muchas actividades. El alquiler de locales comerciales es un indicador importante del rumbo de los negocios.

Los últimos informes publicados respecto de la realidad del sector en el Área Metropolitana del Gran Buenos Aires dan cuenta de una paralización a la espera de mayor certidumbre y estabilidad, y de cambios de hábitos de los consumidores, que hacen ganar una franja cada vez más cuantiosa de las ventas totales a las transacciones vía comercio electrónico.

LA REALIDAD EN EL GRAN RESISTENCIA

La realidad en la capital chaqueña se mueve por sus propios andariveles. Las particularidades del mercado inmobiliario local son conocidas por los especialistas del medio. NORTE consultó a referentes de los corredores inmobiliarios de la ciudad para conocer la situación en el área urbana de la capital chaqueña.

Matías Sironi destacó que tanto propietarios como inquilinos buscan previsibilidad.

Matías Sironi expresó que «Resistencia, como el interior del país, sigue caracterizándose por una muy baja conflictividad en los tratos comerciales. Esto se debe a que el régimen legal para locaciones comerciales hace tiempo es mucho más flexible que el que regula el mercado de alquiler para vivienda, lo que brinda más herramientas para lograr tratos justos entre locadores y locatarios. Hoy se empieza a ver esta misma flexibilidad en los inmuebles destinados al uso residencial, lo que repercute en una mayor oferta ya que se pueden establecer tratos acordes con la realidad económica actual».

«En lo que es puramente comercial, en Resistencia está estable la vacancia, ya que los valores son relativamente normales. Registramos un pago en tiempo y forma del alquiler del 98,2 por ciento según las últimas estadísticas. Hay mucho trabajo para lograr tratos justos y equitativos, y en eso intervenimos los corredores inmobiliarios», agregó.

Respecto de la demanda, Sironi comentó que «tras el cambio de autoridades a nivel nacional la gente estaba un poco paralizada, en estas semanas hemos empezado a recibir llamadas de firmas de logística, de distribución, y también de locales pequeños para actividades profesionales, comerciales. Notamos mayor interés en las consultas. Hay una variación, creo, desde la pandemia en adelante de los gustos de los consumidores. Hoy no es tan relevante que el local esté sobre peatonal o en el microcentro, sino que surgieron muchos rubros que pueden instalarse prácticamente en cualquier sector de la ciudad, y priorizan las prestaciones del inmueble, las posibilidades de estacionamiento y otras características».

«La preocupación, tanto en comercial como en vivienda, es la falta de nuevas unidades. En los últimos años no ha habido inversiones importantes. Aun así somos optimistas, porque el Nordeste argentino es una zona muy emprendedora, y el interior del país tiene condiciones y valores mucho más flexibles que los de las grandes urbes argentinas. Nadie quiere locales vacíos ni tener conflictos con los inquilinos, por ello hay relaciones que se mantienen por años», finalizó.

Caravaca Pazos: «Es un mercado muy dinámico»

En contacto con NORTE, Emilio Caravaca Pazos señaló que «después de la pandemia se vio en Resistencia una tendencia particular: muchas personas o familias que habían comenzado un emprendimiento vía online al ganar flujo de negocio optaron por abrir un local físico. Esto parece ir a contramano de lo que se dice ocurre a nivel global, pero habla de que cada mercado posee su idiosincrasia, y hay que conocerla y brindar respuestas en función de esas necesidades».

Emilio Caravaca Pazos calificó como normal la situación del mercado de locales.

El joven referente de una histórica firma inmobiliaria de la capital chaqueña coincidió en que «otro comportamiento sostenido de la demanda local es ya no buscar exclusivamente un inmueble ubicado en el centro, sino que se barajan opciones focalizadas en otros sectores de la ciudad, teniendo en consideración ventajas como la mejor circulación, los lugares para que los clientes estacionen, el depósito de mercadería y el salón de venta en un mismo sitio, o en el caso de profesionales o pequeños negocios la potencialidad de la demanda de aquello que se ofrecerá. La ciudad se ha expandido y muchos habitantes buscan soluciones en la cercanía».

Fuente: NORTE