El Ministerio de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Territorial entregó certificados del Registro Único de Beneficiarios del Hábitat a 38 familias del barrio Lucha y Fuerza, de la zona oeste de la capital chaqueña.  El ministro de cartera Guillermo Monzón participó de la entrega, en donde destacó las acciones llevadas adelante para dar a las familias herramientas de acceso a mayores servicios. “Estamos muy contentos por este proceso que venimos desarrollando por decisión política del gobernador Domingo Peppo y con la participación de diferentes áreas del Estado, con el Municipio y a través de la Presidencia del Consejo Municipal con la realización de audiencias públicas en los barrios en donde van surgiendo la demandas de los vecinos”, expresó el ministro. La propuesta para el ordenamiento urbano que se inició con la ley de expropiación continúa con la registración de las familias que están ocupando hace más de tres años estos terrenos. Con este certificado, los vecinos pueden iniciar los trámites para las conexiones formales de agua y luz, en tanto que avanza el proceso de regularización dominial. “Eso es importante porque mientras avanza el ordenamiento del barrio, la gente tiene que mejorar su calidad de vida. En este sentido una de las cuestiones fundamentales tiene que ver con los servicios básicos, por eso nos acompañan representantes de las empresas proveedoras Sameep y Secheep”, explicó Monzón. En los barrios se conforman mesas de trabajo que recaban los datos de los ocupantes y reciben la documentación para comenzar con el trámite de formalización de las conexiones. En una instancia previa los equipos de RUBH recorren el barrio y realizan el relevamiento técnico y social, que permite saber cómo están compuestas las familias y con qué tipo de construcción cuentan. El trabajo se articula con el Ministerio de Desarrollo Social que evalúa quiénes pueden acceder al Programa Chaco Subsidia, para el pago de la energía eléctrica.   Vecinos agradecidos  Matías Pérez, vive en el barrio desde hace tres años y aseguró que la misma comunidad fue generando los cambios para el barrio, la división de las parcelas el arreglo de calles. “Estamos muy contentos porque teníamos la ilusión de conseguir esto para mejorar la vida de nuestras familias”, aseguró. Jorge Luis Vargas, está desde hace 19 años en la zona. “Cada vez la gente se iba preocupando más y fuimos viendo cómo nos podíamos ubicar, porque había muchas personas sin casa; después trabajé con mi familia para que nos de este certificado y ahora los conseguimos”, relató.